jueves, 14 de octubre de 2010

Suprema corte


Después de la muerte del ministro Gudiño Pelayo, cualquiera que pretendiera ese puesto, bien podría quedarle "grande" la silla, ya que los métodos para contratar al sucesor de tan importante puesto, que por cierto dura 15 años, son bastante bajos y son oportunistas. Es un buen pretexto para mejorar la condición de perfil de tan importante herramienta para la nación.

1 comentario:

Xuravet dijo...

y el libro apa????

El mismísimo.